lunes, 3 de febrero de 2014

Perra Verde is back. O de cómo me granjeé el odio de los ingenieros.

Este es un blog mayormente humorístico. En el pasado, cuando era joven e ingenua, se me escapó alguna entrada pelín demasiado personal, quizá, pero no quiero que eso vuelva a suceder. La esencia del éxito de mi escritura siempre han sido los "artículos" -si es que se merecen ese nombre- que escribía en estado de cabreo extremo. Ladrando, vamos.

Siempre quise que la gente me leyera, y que se lo pasara bien haciéndolo. Ahora parece que se pasa más gente por un blog que, irónicamente, había abandonado, y sé que hay que asumir que no todos los comentarios van a ser siempre positivos, es lo que hay. Yo no apuesto por la censura, nunca, y de los cientos que ha motivado esta entrada sólo he borrado uno que contenía un link a un hombre con las tripas fuera, y no me pareció decoroso dejarlo ahí. [1]

Para no tener que poner lo mismo en todos, he decidido publicar una entrada aclarando lo que quería demostrar con ese post.

Era un maldito texto gracioso. Os recomiendo que, si no habéis logrado entenderlo así y pensáis pasaros más por aquí, os traigáis el sentido del humor puesto de casa y, si no, no os molestéis en volver. Por vuestro propio bien, más que nada; me preocupa que os salga una úlcera con tanta mala leche retenida. Aquí no le vetamos la entrada a nadie.

Pienso que lo que más os ha escamado es este párrafo en concreto:  "del delicado equilibrio de amar a alguien que pertenece a un mundo completamente distinto: una ingeniería, un módulo, algo que no tiene nada que ver con la desmielinización, el estafilococo Aureus o la anemia falciforme."

Lo he releído un montón de veces y, sinceramente, no sé dónde pone que esas carreras son inferiores a la mía. Pone que son diferentes. DIFERENTES. Quería expresar que son carreras que no tienen que ver con vísceras, sangre, heces o heces con sangre. 

No sé cómo tantos de vosotros habéis visto este texto como una oportunidad perfecta para arremeter contra los médicos por oscuras razones que desconozco; yo siempre he considerado otras carreras, en particular las ingenierías, como similares en dificultad, o incluso más difíciles. Y no las he despreciado en este blog nunca.

Sin embargo, parece que algunos tenéis una espinita clavada en contra de los médicos. Vuestra profesión es tremendamente importante. No podríamos vivir como vivimos sin ingenieros, sin arquitectos...de acuerdo. Las ambulancias no podrían llegar al hospital sin puentes ni carreteras, el hospital no se podría haber construido, vale, sí. Pero entended que la nuestra es una profesión diferente; no hay otra igual. No digo que sea mejor ni peor. Está claro que si la mayoría de las profesiones existen, es porque se necesitan. Pero hay pocos trabajos donde la tarea fundamental sea atender a alguien en su peor momento. No voy a llenarme la boca con frases grandilocuentes del tipo "salvamos vidas". Pero la gente que viene a vernos tiene que hacer un esfuerzo, y depositar una confianza, que no tienen otros oficios. La gente a la que atendemos viene porque se encuentra mal. Puede ser que le duela algo, o que esté deprimida, o que se le esté cayendo el pelo o porque oye voces en su cabeza. Me da lo mismo; puede parecer una tontería, pero es la tontería que les preocupa; o puede ser algo muy serio. Es una relación que nunca será la de cliente-proveedor de servicios, por mucho que nos quieran vender esa imagen. Incluso yo, que no tengo mucha tendencia a involucrarme emocionalmente, comprendo lo delicado de esa relación médico-paciente, precisamente porque he sido paciente y sé que admitir ante alguien que te encuentras mal no es agradable, por mucho que ese alguien sea quien te lo puede solucionar. Por eso creo que la sociedad no puede ver a los médicos como ve a otras profesiones, porque el mundo sanitario tiene unas connotaciones subjetivas que no tienen otros trabajos.

Pensad cuánto vale la calidad de vida, por cuánto la pagaríais, si tiene precio el trabajo que hacemos, en cualquier especialidad. Tiene que ser una satisfacción devolverle eso a alguien (aún no he ejercido, así que todavía no lo sé) pero también es muy fácil para nosotros ser débil y creérselo un poquito. Porque somos humanos. Es un tópico muy extendido, no todos los médicos son ultra-arrogantes pagados de sí mismos... Pero si alguna vez lo somos, si alguna vez, aunque sea temporalmente, caemos en esa falta, que Thor nos coja confesados porque parece ser que saldrán mil voces para clamar contra el médico con complejo de dios. Como si nunca un informático os hubiera mirado con suficiencia cuando le habéis preguntado algo que para él es básico, o el mecánico cuando le decís que si el coche hace un ruido raro, o yo qué sé...[2] La línea que separa el orgullo que uno siente por su profesión y la arrogancia puede ser muy delgada y esta última característica no es, ni mucho menos, monopolio de los médicos. Me preocupa que haya gente con tanto rencor, tan dispuesta a saltar a la yugular del médico ante la más mínima provocación o, como en este caso, ante provocaciones imaginarias. Porque esa gente no se levantará para defender nuestra sanidad pública ahora que nos la están arrebatando. Pero ese es otro post y otro tema.

Otro punto que me gustaría aclarar es que vale, se meten muchas horas, pero no me he pasado los seis años de carrera encerrada en mi habitación aprendiéndome el Harrison (libro que por otra parte no me gusta nada y pienso que está bastante sobrevalorado; hala, ahora los de medicina me odiaréis también). Claro que puede haber un equilibrio, y que también hay que vivir y salir con los amigos y pasear con el perro y hacerle caso al novio y todo eso. No pretendáis convertir ese texto en algo que no es en absoluto: un retrato completo de mi vida. Es un aspecto determinado de mi vida, un poco exagerado para que resulte cómico. Punto pelota.

Y bueno, me he cansado de aclarar cosas. Si no he dejado algo claro, esta vez sí que podré ir respondiendo comentarios a medida que los vais dejando.

Ah, casi me olvido: muchas gracias a toda esa gente que ha dejado mensajes de ánimo o simplemente diciendo que les ha gustado el post. Habrá más de ese estilo; espero que este sea el último "post serio" aunque, sinceramente, no estoy segura de poder garantizarlo. Al parecer no me expreso tan claramente como creía. 



Saludos, y nos vemos por aquí.







 [1] Aclaración desagradable: a su autor, si me está leyendo, le aclararé que yo escribí que las tripas "no se salen como ristras de chorizo", en hilera. En la foto que él puso se ve claramente que no se salen así, sino en gurruño. Espero que estés contento por hacerme aclarar este punto.

[2] Por favor, POR FAVOR, mecánicos e informáticos, no entendáis este comentario como el inicio de una guerra de guerrillas entre vosotros y los médicos. No tengo nada en contra de vuestras profesiones y sólo os he nombrado a modo de ejemplo. No os estoy declarando la guerra, repito, no-os-estoy-declarando-la-guerra.

6 comentarios:

  1. Hola! He llegado aquí de casualidad y queria decirte que el post ha sido gracioso, ES gracioso y no parece ofensivo en ningún caso. Supongo de todas formas que siempre puede haber gente que se ofenda, hables de lo que hables...
    Ánimo!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias! Me alegro de que haya gente que lo haya entendido como lo que es...un saludo ;)

      Eliminar
  2. Uhmmm note que desapareció ESE articulo. En realidad lo extraño, pero respeto tu decisión. Tenia muchísimo que no pasaba por aquí y me he sorprendido con la enorme cantidad de comentarios que hay en la entrada en cuestión! Cuando lo vi había menos de 10! Y Perr... Pierde cuidado. En mi caso yo también creo que el Harrison esta sobrevalorado, no me gusta nada! Que bueno que volviste :) No desaparezcas de esa forma otra vez. Porfa. Que es que me gusta leerte!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se intentará seguir, aunque es una época complicada. Gracias por pasarte! ;)

      Eliminar
  3. Paaaaasa de los que te hicieran esos comentarios... me reí mucho con el artículo y hace falta estar acomplejado para pensar que te están haciendo de menos por esa tontada... Que alegría que hayas vuelto a ladrarnos algo!! :)


    ResponderEliminar
  4. Como estudiante de medicina tengo que decirte que leer tu blog durante esta dura época de exámenes ha sido mi mejor válvula de escape, me he sentido muy identificada con muchísimas cosas de las que has escrito y me he reído un montón, llegue aquí precisamente por ese post sobre alumnas de medicina y sus novios, y el mío quedo encantado! muchísimas gracias por los buenos momentos y animo!!!

    ResponderEliminar